miércoles, 28 de agosto de 2013

SIN QUERER SE LIA LA COSA


Andrey Belichenko


Es la hora del descanso del guerrero, llegar a casa, quitarte los ropajes, pantalón corto y camiseta, cervecita y sofá, pero, cambian los planes y yo no quería porque soy una persona tranquila, hogareña, nada ruidoso, tímido, pero claro, veo a mi amor dormida de esta guisa y que puede hacer un santo varón como yo, pues mínimo dar el grito de Tarzán y atacarla por el flanco que está libre, primero la suerte de rodillas, la guiñas un ojo, la das las “buenas tardes amor”, aquí me tienes para lo que haga falta...

En qué horita...

Toda la tarde con su noche, y claro, mañana vas y trabajas, mañana vas y produces, mañana vas y no levantas cabeza del ordenador y los cálculos, y por lo bajinis calculas las horas que te quedan para tirarte en plancha a la cama, ojo, a dormir, que hay mucha mal pensada que piensa que todos los días son fiesta, no hija no, día sí y día no, día sí y día no, día sí y día no (se ha rayao el jodío).

Llega el guerrero a casa, se quita los ropajes, pantalón corto y camiseta, cervecita y sofá, pero... la jodimos, está dormidita, insinuándose, soy débil, tranquilo, hogareño, nada ruidoso, tímido... me sale un grito de Tarzán que se mueven los cristales, me acoge en su seno...

En qué horita...

Toda la tarde con su noche, y claro...
¿Pues sabes lo que te digo?

Mañana no trabajo, estoy malito


Saudades 2013

PD.- Necesitamos del humor tanto como del amor.


 

jueves, 22 de agosto de 2013

MARIONETAS




Michael Cheval
 

Demasiadas veces no nos damos cuenta de cómo juegan con nosotros, somos los peones del ajedrez dispuestos a morir por causas ajenas, nos mueven desde todos los medios de comunicación de masas, desde el poder y si te sales de la función serás tachado de rara avis, tenemos que seguir la corriente establecida, tenemos que olvidarnos de los valores que nos inculcaron y que guardábamos como un tesoro, tenemos que seguir, gota de agua, el cauce del río sin osar quedarnos en la orilla, tras el telón están las fuerzas ocultas que mueven el mundo, tienen torres, alfiles y caballos por toda la tierra, a unos les ordenan masacres para alimentar a las poderosas industrias de armamento, a otros les roban sus materias primas y los dejan morir poco a poco de hambre, otros viven cómodamente sin temor al mañana pero cada vez son menos.

Yo no soy gota de agua, me considero un simple grano de arena que ve la vida pasar dándole importancia a lo que realmente la tiene, que no hace masa al ir por libre, no creo en tanto iluminado, en tanto vendedor de humo, en tanto pastor que lleva al rebaño al matadero, creo en la persona, en el que lucha cada amanecer por salir adelante, en el que trabaja con una sonrisa sin dejarse pisar, creo en la naturaleza que nos rodea, cada vez más escasa, creo en el pajarillo que laboriosamente construye su nido, la casa para su familia, creo en muchas cosas que no veo pero presiento, creo en lo que me enseñaron mis mayores, los libros, la vida, los tropezones, creo que somos algo más que números que tenemos que luchar contra la injusticia, contra los ladrones de manga ancha, contra los predicadores que te venden paraísos, creo que estamos aquí para algo más que ser números, empecé siendo interrogación y ahora sé lo que quiero y quiero que nadie intente manejarme sé caminar solo, sé dónde está mi destino, en un lugar apacible lejos de la larga mano del poder.

Llega el atardecer, me espera el riachuelo para contarme su historia que empieza en la montaña, me espera la luna para contarle mis vivencias y me espera la brisa, el tintineo de las hojas en los árboles, y posiblemente, a mi lado, esté esa otra mano que se aprieta a la mía.

 

Saudades - 2013

lunes, 5 de agosto de 2013

SE VE POR EL HORIZONTE




Se ve por el horizonte marchar un jinete, vaga solitario por el mundo sin un final en su camino y siempre un camino por seguir. De vez en cuando se para a dar descanso a su caballo Stradivarius y a su cuerpo y respira con fuerza el aire.

El jinete, que toda su vida dedicó al estudio de los libros, entiende la búsqueda del conocimiento y la ve en el perfecto orden de la naturaleza, en las estaciones que son como etapas de una vida, la primavera donde florece el conocimiento, el verano donde alcanza la plenitud, el otoño donde disfruta de lo aprendido y el invierno donde lo guarda en lo más profundo de su ser.

Él, que aún se encuentra lejos del conocimiento y que se siente en la primavera va andando caminos, va aprendiendo en cada amanecer, en cada vuelo de ave, en cada canto de pajarillo, en cada flor que se abre al sol, él, que abandonó el mundo de las personas y que vaga por un mundo incierto se asombra a cada momento y pierde la noción del tiempo que para él no existe, existen esas fotografías captadas por su retina, existen esos riachuelos que bajan cantarines, existen esas hormigas que nacieron y morirán trabajando, existe el aullido del lobo llamando a la manada, existe la sonrisa cuando amanece a una nueva mañana.

Se ve por el horizonte marchar un jinete, su mochila está repleta de emociones y vacía de pertenencias, sigue haciendo camino.

Se escucha el canto de un ruiseñor a la orilla del riachuelo, el jinete se para y sonríe, el jinete quisiera contestarle y se conforma con admirarle, con mirarle y con sonreír.

Se ve por el horizonte marchar un libro que está escribiéndose, está en sus primeras páginas, en esas cargadas de Ilusión,  el final está aún lejano…

Saudades- 2013