GEORGE ORWELL

La República no pudo con George Orwell aunque si con su amigo el británico Bob Smile, que murió a causa de las palizas, mientras era interrogado en la checa barcelonesa de la Puerta del Angel. Gracias a ello hoy podemos leer una obra profética en muchos sentidos "1984".

Un testigo tan excepcional como George Orwell dejó ya denunciados, hace setenta años, los planes del "conseller". Su "Homenaje a Cataluña es un recuerdo del futuro, una llamada de alerta ante una izquierda empeñada en imponer doctrinas de odio desde las leyes y las instituciones.

Al ver su vida en peligro, ante el cruento "cordón sanitario" impuesto por el PSUC contra todo disidente, Orwell tuvo que escapar de aquella Cataluña que hoy añoran los socios de Zapatero, y el mismo. Gracias a que se libró de ser asesinado, el autor de "1984" pudo escribir, como si fuera hoy mismo, esta firme denuncia contra la manipulación histórica que apadrinan los nacionalistas junto a socialistas y comunistas:

"Lo que es característico de nuestro tiempo -escribió Orwell- es la renuncia a la idea de que la historia podría escribirse con veracidad. El objetivo tácito de esta argumentación es un mundo de pesadilla en el que el Jefe, o la camarilla gobernante, controla no solo el futuro, sino también el pasado. Si el Jefe dice de tal o cual acontecimiento que no ha ocurrido, pues no ha ocurrido; si dice que dos y dos son cinco, dos y dos serán cinco".

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Si Orwell levantara la cabeza vería la exactitud de sus palabras en esta España dominada por los separatismos fuleros y por el socialismo, más separatista que los propios nacionalistas que padecemos.

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!Ojo, te estamos vigilando!!!